CONCIERTO HUALINERO

ASEGURA QUE EL ÉXITO CONQUISTADO RADICA EN SU VOZ Y HUMILDAD

“la dulce hualiluma” se gano el cariño de san mateo

Angélica Carlos “La Dulce Hualiluma”, en el 2012, fue la hualinera más aclamada del valle de Santa Eulalia y el último 16 de marzo del 2013 debuto con un gran  brillo en el distrito de San Mateo, en el cierre de la carrera hípica organizada por el Cuerpo de los Andes.

Los hinchas de "La Dulce Hualiluma"  le mostraron todo su cariño esperando su pronto retorno. 

Sus admiradores del club hípico "Unión Tigres" de  subieron al escenario para cantar junto a ella la hualina "Ingrato destino".

Angélica Carlos "La Dulce Hualiluma", compartió muy emocionada su amistad con sus hualihinchas de San Mateo.

Ella al ritmo de sus hualinas  como “Ingrato destino”, “Mi vida es como una hoja seca”, “Ramito de ilusiones”, entre otros, hizo vibrar de emoción el local de la hermandad de Tapo, ganándose el cariño de sus nuevos hinchas, en especial del club hípico “Unión Tigres” de Matiparara, “Los Toritos”  de Collata, Club Cultural San Mateo y del  “Cuerpo los Andes” con Edwin Bancas Grados, Edgar y Fausto Pahuacho.

Ahora sus éxitos de “La Dulce Hualiluma”, suenan muy fuerte en San Mateo y sus anexos acaparando la atención de los hualineros, al respecto revelo “No me gusta alagarme, yo soy una mujer humilde. Pero, doy gracias a Dios por haber heredado la voz de mi madre para cantar estos versos tan lindos”.

Por otro lado, se realizó la premiación de los ganadores de la competencia hípica, que fueron:

Primera categoría: Delfín Paucar.                    Segunda categoría. Héctor García.

Tercera categoría: Luis Arias.                           Cuarta categoría A: Jhunior Landa.

Cuarta categoría B: Aderlyn de la Cruz.

INGRATO DESTINO

Letra y música: Robert García Alarcón

Canta: Angélica Carlos “La Dulce Hualiluma”

   

Caminando por la altura, llego al manantial de Puquia
y al mirar brotar aquellas aguas, la esperanzas de mi vida.(BIS)

Ingrato destino quieres que yo me retire,

pero caprichoso hoy he vuelto a Chaupiloma.

Si algún día ya no formo mi caballo en Chaupiloma,

será que el destino quiere que sea un recuerdo.

Si algún día ya no canto mi hualina en Hatunmayo,

Fue la negra noche, que ha opacado ya mi vida.

Oye noche oscura, no apagues deja que amanezca,

Y me encuentre yo cantando.

Esa estrella en Jatunmayo es eterna de por vida,

Asi mi hualina es eterna en Chaupiloma.

Nota: En la última producción discográfica de “La Dulce Hualiluma”, lleva el título de “Caballito de Chaupiloma”. Pero sus hualihinchas lo han bautizado como: “Ingrato destino”. ¡Un hualinazo para llenar con lágrimas un vaso de cerveza!