AA. HH "JUAN VELASCO" EL 30 DE MARZO CELEBRÓ 50 AÑOS DE CREACIÓN
El Asentamiento Humano Juan Velasco Alvarado, ubicado
en la margen izquierda del río Rímac se fundó el 31 de marzo 1972 con 300
socios de origen provinciano ansiosos de adquirir un terreno para construir sus
viviendas de manera organizada a causa de las migraciones masivas del campo
hacia la ciudad en busca de una mejor expectativa de vida.
Después de múltiples acuerdos, asambleas, intentos
de erradicación y gestiones este anhelo de la ocupación formal de las tierras se
concretó el 23 de enero de 1978 mediante Resolución Directoral
036-78-IVR-DR-CAJ que da paso al reconocimiento del Asentamiento Humano “Juan
Velasco Alvarado”.
Entre los primeros socios que llegaron a radicar
fueron vecinos de Ricardo Palma, Santa Ana, Daniel Hipólito, Cupiche,
Huayaringa, Piedra Grande, entre otros.
Primero fueron las esteras envueltas en la
marginalidad y la pobreza y luego las construcciones modernas de casas de
material noble, respetando las tierras sagradas de los sitios arqueológicos pre
incas de Tres Marías y San Pedro de Mama que han sido custodiados por el
Instituto Nacional de Cultura, hoy Ministerio de Cultura.
En reconocimiento a este rico patrimonio, los
socios optaron por buen tiempo denominarse Asociación “Tres Marías”, siendo
posteriormente bautizado como Asentamiento Humano Juan Velasco Alvarado,
forjado en la periferia del casco urbano del distrito de Ricardo Palma.
Cabe indicar, que la palabra asentamiento, es
sinónimo de informal, precario, Ilegal o irregular, tugurio, invasión, barriada,
tal como se les llama en distintos países.
Desde su creación hace 50 años la lucha por superar
las principales carencias como agua potable y desagüe, electricidad, pistas y
veredas, parques y jardines, entre otros, ha sido una constante como parte de
la debida formalización.
A lo largo de estos años, también están escritas en
el corazón de su gente las innumerables faenas, trabajos comunales, cuotas,
actividades sociales y la participación vecinal que ha sido el motor para
lograr el progreso.
Mas adelante se forman los comités vecinales,
después se constituyen los clubes de Madres como consecuencia de los comités
del programa del Vaso de Leche y por último nacen los comedores populares entre
los que resaltan “El Buen Samaritano”, “Señor de Muruhuay” y “Anita” que siguen
funcionando hasta la actualidad.
Según la historia, el primer presidente fue el
señor Prado reconocido como el “Buen Samaritano” y lo que talvez pocos saben es
que los lotes fueron entregados por sorteo.
En suma, hoy el Asentamiento Humano Juan Velasco, se
ha transformado en un asentamiento humano más habitable. Es decir, ha logrado
con mucho orgullo dar un gran salto de una morada informal a una ciudad
reconocida en creciente camino hacia la modernidad. ¡Felices Bodas de Oro!